Alone

Supongo que en esta etapa que se aproxima, me dará un vuelco la vida. Supongo que,

estoy en ese maldito punto en el que, si ahora mismo me preguntas quién soy, puede que

no te sepa contestar. Supongo tantas cosas, al fin y al cabo.

Algo me queda claro, todo es pasajero, nada es para siempre y las cosas terminan.

Así como termina lo bonito, también termina lo malo. Así cuando un río muere, otros yacimientos

nacen. Porque donde algo termina, algo renace de nuevo. Estoy segura de ello.

Y no sé por qué, algo me hace cuestionarme por qué estoy aquí, cuál será mi misión en este lugar. Si

acaso habré venido a cambiar este maldito mundo, darle un poco de sabor a dulzura;

darle un poco de brillo, e intentar buscar explicación alguna a lo que soy.

Porque yo, yo (...).

No sé qué estoy haciendo.

No sé hacia donde ir,

pero también sé

donde jamás volver.

Aunque, te mentiría si dijera que no te echo de menos.

No pasa un jodido día en el que no piense en ti.

Me dueles.

Como un recuerdo que me quema a cada instante,

como la pasión rojiza de un fuego que se marchita lentamente.

Porque me quemas, me hieres.

Porque fuiste aquella historia que jamás podré contar.

Porque fuiste lo más bonito que jamás podré alcanzar.

Porque, simplemente fuiste,

y aunque la pena me invade;

no somos, ni seremos...

Todavía lo recuerdo todo, ¿sabes?

Cuando tendiste tu mano por primera vez cuando yo más lo necesitaba.

Cuando pedía ayuda a gritos y tú estabas.

Cuando me sentía sola, y en ti me refugiaba.

Porque eras eso, un refugio para mí.

Un dulce hogar,

que ahora sólo puedo recordar.

Porque todavía recuerdo tu olor,

o tus temibles ojos marrones de los que un día, me enamoré.

Porque todavía recuerdo

tus besos en la madrugada,

y tus: <<¡te quiero!>>,

al oído cuando menos me esperaba.

Porque recuerdo esos abrazos en los que,

me sentía completa.

Porque recuerdo esos labios,

que un día me tocaban.

Odio no poder odiarte, porque aunque quiera,

no te odio, ni siquiera un poco.

(...).